Con este nuevo post de nuestro hospital veterinario en Móstoles, queremos ofreceros información importante sobre la diabetes en gatos como sus causas, tipos o síntomas.
Si compartes tu vida con un pequeño felino, este artículo te interesa. ¡Empecemos!
Causas de la diabetes en gatos
Existen varias razones por las que un gato puede desarrollar diabetes. La obesidad, edad, inactividad y ciertos medicamentos pueden aumentar el riesgo de desarrollar la enfermedad.
Una dieta inadecuada o una mala nutrición y el sedentarismo, también pueden contribuir al desarrollo de la diabetes en los gatos.
Tipos de diabetes en gatos
La diabetes es la enfermedad endocrina más frecuente en gatos. De forma general, se describen tres tipos de diabetes: diabetes mellitus tipo I, diabetes mellitus tipo II y diabetes tipo III o secundaria.
La diabetes mellitus tipo I se desarrolla cuando los gatos no producen suficiente insulina. Suele tener un origen genético y no es especialmente común en el gato.
La diabetes mellitus tipo II se produce cuando se produce insulina pero los gatos no responden a ella adecuadamente, o hay una secreción pobre de la misma, generalmente debido a una mala alimentación, a la obesidad o al sedentarismo.
La diabetes subclínica, tipo III o secundaria también puede ser un problema para los gatos. Puede ser temporal, causada por el estrés o la ingesta de ciertos medicamentos, o por enfermedades como la pancreatitis crónica.
Alrededor del 90% de los casos de diabetes en el gatos, se clasifican como tipo II.
Síntomas de la diabetes en gatos
Los síntomas de la diabetes en los gatos incluyen aumento importante de sed y micción, aumento exagerado del apetito, pérdida de peso y letargo.
En casos más graves, estos síntomas pueden empeorar con alteraciones del movimiento, deshidratación, vómitos e incluso depresión.
Los peligros de la diabetes en gatos
La diabetes no tratada puede ser muy peligrosa para los gatos. Es importante tomar medidas para controlar y tratar la diabetes tan pronto como sea posible.
Si el nivel de glucosa en la sangre de un gato no se controla adecuadamente, puede tener complicaciones muy graves como síntomas neurológicos, debilidad grave, cetoacidosis diabética, coma, incluso muerte del animal en los casos más graves, entre otros.
Si notas o crees haber apreciado algunos de los síntomas en tu gato que hemos mencionado, es importante que acudas a nuestro centro veterinario en Móstoles para realizar un diagnóstico adecuado. Os esperamos en la Clínica Veterinaria Puerta del Sur.